Ricardo Arjona - Buenas noches don David
buenas noches doña Marta es un placer.
si me he vestido de negro no es por luto créanme,
aunque si esto no es la muerte se le ha de parecer.
Le aceptaría doña Marta un cafecito de preferencia bien cargado,
debería tomarse don David algo fuertecito,
para que este más relajado…
No frunza el ceño don David,
no me odie antes de tiempo,
y diga me ¿cómo está el trabajo don David?,
¿qué hay de la economía?,
¿cómo anda el fútbol?,
cuente doña Marta lo que quiera,
si quiere hablar de la cocina,
digan algo por favor para no ir directo al punto…
Se preguntarán qué diablos hago aquí,
toda una vida de vecino y nunca vine a visitar,
pues resulta que este humilde servidor,
se ha enamorado de Martita su hija la menor…
Le suplicaría atentamente don David,
no meta a mi madre en esto,
sé bien la fama que me han dado de truhan,
pero juro que esto es honesto…
No se levante don David,
no me odie antes de tiempo,
y dígame ¿cómo está el traguito don David?,
tómese otro poquito,
salud por la familia,
qué bonita casa doña Marta,
¿fue idea suya las cortinas?,
siéntense y relájense,
que esto está solo que empieza,
Me enamoré de ella,
que quieren que les diga si me enamoré,
se enamoró de mí,
que quieren que haga si se enamoró,
nos enamoramos,
sé que no he sido un ejemplo pero me enamoré…
Todo empezó aquel martes a las tres,
ella iba a la escuela y la encontré en la estación,
era apenas una niña semanas atrás,
y la descubrí mujer en un vestido café.
No fue fácil conquistarla don David,
la perseguí por todos lados,
y entre más difícil se ponía don David,
yo más enamorado…
Ya no me grite don David,
no me odie antes de tiempo,
y sepa usted que estoy orgulloso don David,
de la hija que ha formado,
una dama hecha y derecha,
que además de ser hermosa,
es mujer como ninguna…
Se parece a doña Marta con todo respeto…
Me enamoré de ella,
que quieren que les diga si me enamoré,
se enamoró de mí,
que quieren que haga si se enamoró,
nos enamoramos,
sé que no he sido un ejemplo pero me enamoré…
Antes de que yo me largue como es su voluntad,
sepa usted que si me largo ella se viene de una vez,
porque fruto del amor que nos tenemos,
Martita y yo,
pronto seremos tres…
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