Ricardo Arjona - Frente al televisor
me vende unas pastillas para adelgazar,
el detergente de moda, la mejor rasuradora,
y hasta el circo de Moscú, un sillón que da masajes,
y la colección de trajes de Hugo Boss.
Un cigarro que te hace hombre,
una bruja que te lee el nombre y el café,
unos refrescos que te quitan la sed,
y un aparato de ejercicios pa’ que te den.
Me venden relojes, pulseras y adornos,
y hasta una porno en pay per view,
la cura de todos tus males,
si es que le haces al gurú,
y yo que solo espero que salgas tú,
pa’ que valga la pena este desvelo,
si te fuiste de aquí para hacerte modelo,
sal tomando coca cola, mascando un chicle,
o moviendo el trasero en un anuncio de jeans,
montada en un caballo de los de Marlboro,
o echándote esa pomada que te abre los poros,
y cura el acné, pero sal por favor,
que hace ya tanto tiempo que no se te ve.
Y yo sigo buscándote frente al televisor,
me duermo con el himno y me despierto a las 6,
pa’ ver si en las noticias eres tú la del clima,
o quizás la asesina de un tipo que muere,
de tanto extrañar.
Y yo sigo buscándote frente al televisor,
primero aparezco yo con mi cara de idiota,
cantando lo mismo, haz que valga la pena,
tragarme siete novelas por verte otra vez.
Quiero ver tu silueta moviéndose allí,
investigar en tus ojos si te acuerdas de mí,
o si fue solo una excusa, una gran escaramuza,
para largarte de aquí,
mientras que Ronald McDonald,
me da papas gratis si compro un big mac.
Y yo sigo buscándote frente al televisor,
me duermo con el himno y me despierto a las 6,
pa’ ver si en las noticias eres tú la del clima,
o quizás la asesina de un tipo que muere,
de tanto extrañar.
Y yo sigo buscándote frente al televisor,
primero aparezco yo con mi cara de idiota,
cantando lo mismo, haz que valga la pena,
tragarme siete novelas por verte otra vez.
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